La libertad interior es muy importante, revela que estamos libres de ataduras, miedos, prejuicios, inseguridades que nos impiden hablar, opinar, actuar, expresar lo que pensamos, realizar lo que queremos; manejamos a veces unas barreras invisibles que nos paralizan. Esta libertad bien administrada, con el debido respeto por el otro, con prudencia y sensatez, nos abre puertas al exterior se nuestro yo íntimo, facilita nuestra comunicación con Dios, con nosotros mismos, con los demás y con la naturaleza, eleva la autoestima el sentirnos escuchados y tenidos en cuenta. ¡Es maravilloso este magnífico don que Dios nos da!! El buen uso de la libertad da armonía, paz y amor, somos libres para amar y perdonar, para dar y recibir, para comprender y disculpar. decir: empezamos a vivir la ” SAGRADA ESCRITURA, en el libro de TOBIAS, el padre dándole consejos a su hijo: “Sé responsable hijo mío de todo lo que hagas, y actúa siempre con rectitud. No HAGAS A LOS DEMAS, LO QUE NO TE GUSTA PARA TI “. Tobías, 4, l5-16 Y el mismo Jesús nos dice: ” Y LO QUE QUIERAS QUE OS HAGAN LOS DEMAS, HACEDLO VOSOTROS IGUALMENTE” Lucas 6,31
Bendiciones.
Sor Ma. Isabel Martínez S.