UNA HISTORIA DE AMOR QUE DEJA HUELLAS IMBORRABLES
Por Sor Lilia García Isaza
Nuestra Provincia de Cali es una porción de la Compañía de las Hijas de la Caridad; su historia, su desarrollo, su misión, todo lo que ocurre, es algo que debe interesarnos para solidarizarnos con ella poniendo a su servicio lo que somos y lo que tenemos. Todo acontecimiento de la Provincia es acontecimiento salvífico, que nos lleva a fortalecer los vínculos de unidad, a la vez que a mantener y fortalecer el espíritu. Los acontecimientos y las personas son luz en el camino y hablan de Dios y de su providencia, como nos lo recuerda San Vicente.
La historia de nuestra Provincia es larga y hermosa, muchas páginas se necesitarían para plasmar en ellas esa estela luminosa de caridad, escrita por centenares de Hermanas que han dejado huellas imborrables a lo largo y ancho de nuestra patria. Esa historia habla también elocuentemente de la actualidad del Carisma de San Vicente y de Santa Luisa.
El Papa Francisco, en la Carta Apostólica a los Consagrados, nos dice que es oportuno que cada familia carismática recuerde sus inicios y su desarrollo histórico, para dar gracias a Dios que ha dado a la Iglesia tantos dones que la embellecen y la preparan para toda buena obra. Nos recuerda también que la fantasía de la caridad no ha conocido límites, y ha sido capaz de abrir innumerables sendas para llevar el mensaje del Evangelio a las culturas y a los más diversos ámbitos de la sociedad.
Nada más placentero que presentar Una Historia de Amor que resulta fascinante y que nos lleva a exclamar con el salmista: “Qué grandes son tus obras, Señor”. La lectura de algunos hechos de la Provincia despertará en nosotras una profunda gratitud hacia Dios y nos llevará a un compromiso cada vez más radical con Él y con los pobres. Es urgente comprender mejor el Hoy de nuestra historia con toda su problemática, y buscar, con la audacia de los Fundadores, soluciones concretas y futuristas.